El estado de trance puede ser inducido por tambores o ritmos repetitivos es una experiencia que ha sido practicada por diversas culturas y tradiciones alrededor del mundo durante milenios. Este fenómeno se logra a través de la repetición rítmica de sonidos, como tambores, cantos monótonos o instrumentos de percusión, que tienen el poder de alterar el estado de conciencia de las personas y llevarlas a un estado de trance.
Durante este estado de trance, las personas pueden experimentar una variedad de sensaciones, que van desde la relajación profunda hasta la euforia extática, pasando por visiones, emociones intensas y una sensación de conexión con lo divino o lo espiritual. El trance inducido por ritmos repetitivos se ha utilizado en diversas tradiciones con propósitos rituales, curativos, chamánicos, religiosos y de celebración.
En muchas culturas indígenas, el trance inducido por tambores es utilizado por los chamanes o líderes espirituales para entrar en contacto con el mundo espiritual, comunicarse con los espíritus, realizar curaciones o buscar visiones. En las tradiciones africanas y afrocaribeñas, como el vudú y la santería, los tambores desempeñan un papel central en las ceremonias religiosas y los rituales de posesión, donde los participantes pueden experimentar la posesión por espíritus y deidades.